Los militares de Gran Bretaña están preparando plan de una eventual acción en respuesta al presunto ataque químico en Siria, informó hoy un portavoz del primer ministro británico, David Cameron.
Dijo que la respectiva decisión todavía no se ha tomado. Cameron, interrumpió ayer sus vacaciones para celebrar el miércoles una reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad Nacional.
El Parlamento también puede reunirse antes de concluir las vacaciones estivales de sus diputados, para debatir la posición del Reino Unido respecto a la operación militar en Siria.
La tensión aumentó en Siria después de que varios medios informaran el 21 de agosto sobre un ataque químico efectuado supuestamente por el Ejército sirio cerca de Damasco, con unas 1.300 víctimas mortales, según la oposición.
El canciller británico William Hague señaló el lunes pasado que la intervención militar podría empezar sin contar con el apoyo de todos los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU.
El exprimer ministro británico, Tony Blair, exhortó al Gobierno a ponerse del lado de la oposición siria. En un artículo publicado hoy en The Times, Blair comparó el ataque químico contra la población civil con "los más macabros tiempos del régimen de Sadam Husein".
Blair fue primer ministro en 2003, cuando su Gabinete apoyó la intervención en Irak bajo el pretexto de prevenir el supuesto desarrollo por Bagdad de un arma de exterminio masivo y ante el uso de agentes tóxicos por Husein contra su propio pueblo.
Más tarde Blair fue fuertemente criticado por la oposición y la prensa por haber arrastrado a Gran Bretaña a ese conflicto sangriento y duradero.