domingo, 19 de febrero de 2017

Empresas brasileras pagaron fortuna a García por una sola conferencia

Sergio Tejada pregunta por qué le pagaron tanto por hablar solo una hora y media.


Arturo Cruz
DIARIO UNO

El expresidente de la llamada Megacomisión que investigó las irregularidades cometidas en el segundo gobierno aprista, Sergio Tejada, dijo ayer al diario UNO que el solo hecho de que el mayor gremio empresarial de Brasil llegara a pagarle 100,000 dólares a Alan García por una sola conferencia de hora y media, demuestra que se trató de una muestra de gratitud por el trato recibido en el Perú.

Comentó así la publicación del semanario Hildebrandt en sus Trece, en la que se detalla cómo fue que García llegó a cobrar tan elevada suma, sin parangón en los niveles políticos y académicos, donde las más valoradas exposiciones oscilan entre pagos de 15 mil y 30 mil, máximo 50 mil dólares.

Indicó que el expresidente Alan García sería el único profesional, político, experto o analista en la historia internacional de las conferencias a quien le han pagado alguna vez 100,000 dólares por una sola charla, lo que significa más de 1,000 dólares por minuto. "Ni un presidente o ex presidente de los Estados Unidos llega a cobrar esta suma", aseveró.

Tal parece que no recibió esa consideración especial porque sus conocimientos y experiencias de gobierno se refieren a éxitos económicos o de gestión en general, o demostraciones de atinadas políticas para sacar adelante a su país, el Perú. Por el contrario, en su primer gobierno, una inflación de cuatro dígitos y en el segundo un desgobierno donde el Estado fue arca abierta, no constituyen méritos a exhibir.

¿Por qué entonces, fue contratado para dictar tan cara conferencia, no ante principiantes y ávidos estudiantes de economía o marketing, sino ante los curtidos halcones y águilas del empresariado brasileño?

AMIGOS AGRADECIDOS
Al respecto, Tejada opinó que el pago tan singular de 100 mil dólares en las condiciones señaladas indica que existía una especie de gratitud por los servicios recibidos por las empresas Odebrecht durante la administración de Alan García.

El evento fue el 25 de mayo del 2012 en la sede de la Federación de Industriales del Estado de Sao Paulo (FIESP) que agrupa a las principales empresas constructoras brasileñas y consorcios del sector, una especie de Confiep carioca.

Cuando García fue contratado para esa conferencia para pasar luego por caja, su buen amigo Marcelo Odebrecht (Presidente de la corporación Odebrecht) era Vicepresidente del Consejo Superior de Infraestructura, una de las más importantes estructuras del FIESP.

En la mente de Marcelo Odebrecht estaban todavía frescos, seguramente, los recuerdos de viejos amigos, de cuando manejaron tan bien y productivamente los negocios viales del Perú, con la ayuda entusiasta y obediente de personajes como Enrique Cornejo, el entonces ministro de Transportes, defensor irreductible de las adendas en los contratos de licitación.

CONFERENCIAS "RENTABLES"
La plata llega sola 
Las conferencias que había dado Alan García después de su segundo periodo de gobierno cobraron notoriedad cuando el expresidente, acogotado por las presiones para que explique cómo compró en Miraflores una lujosa casa de 830,000 dólares, tuvo que presentar al Ministerio Público cuentas de ingresos.

Expresó entonces que en los meses anteriores había ofrecido 18 conferencias en universidades e instituciones ávidas de recibir baños de sus conocimientos y experiencias. Y citaba la conferencia ofrecida en la FIESP de Brasil como un ejemplo de lo bien que le iba en esa actividad.

Cosa difícil de probar, por cierto, ya que la mayoría de conferencias en los grandes centros del saber e instituciones de expertos le generaron estipendios que oscilan entre los 15 mil y 50 mil dólares por hora y media o dos de exposición. Y no más.

"La investigación del Ministerio Público –recuerda Hildebrandt en sus Trece– quedó en nada por obra y gracia de José Peláez Bardales, exfiscal de la Nación próximo a Alfonso Ugarte".

En muchos de los casos –aunque por montos menores– García fue contratado por empresas que negociaron con su segundo gobierno, como Endesa, Kimberly Clark, Junefield Textiles Company Limited y GS1 Perú.

Paulo Skaf, reiterado presidente de la poderosa FIESP brasileña.

Paulo Skaf, reiterado presidente de la poderosa FIESP brasileña.

ADEMÁS
El que atendió en aquella ocasión a García fue Paulo Skaf, presidente de FIESP que en varios periodos suman ya 14 años en el cargo, quien quedó contento porque García llamó a Brasil "hermano mayor" y sostuvo que a todos conviene el desarrollo de Brasil porque "Si Brasil crece, nosotros también".

http://diariouno.pe/2017/02/12/empresas-brasileras-pagaron-fortuna-a-garcia-por-una-sola-conferencia/