miércoles, 15 de marzo de 2017

Para la reflexiòn de los peruanos de piel negra

El Discurso de la Africanidad fue desmontado por el Censo 2001 en Venezuela.             

                                                      Por Brunilde Palacios Rivas Y Antonio José Guevara

"La esclavitud es la infracción de todas las leyes, la violación de todos los derechos".

                                                                                                                             Simón Bolívar

La Constitución Bolivariana, aprobada en octubre de 1999, incluye en sus diferentes silogismos jurídicos, el reconocer los derechos de los pueblos originarios que motivaron la venezolanidad, en el que se tomó en cuenta el papel jugado por los venezolanos que poseen una piel negra[1], lo cual representa un gesto de integridad, unidad y de soberanía, puesto que sin tal reconocimiento se hacía imposible darle forma a la toponimia venezolana, ya que dichas poblaciones, vinieron a conformar esa realidad, siendo uno de los proyectos que por su envergadura, dejaron una marca muy precisa en la forma de pensar de los venezolanos, por ello el constituyente[2] no dejó de reconocer que es una de las culturas originarias que motivó la venezolanidad, puesto que al igual que las indígenas y europeas, se convirtieron en el fundamento  que le dio vida a la Republica[3]. Por ello a Miranda y Bolívar no les quedo sino hacer un proyecto integracionista, puesto que tuvo que tomar en cuenta  las implicaciones que surgieron como producto de la gesta libertaria, en el que se pudiera sostener que la venezolanidad nace ligada a la Gran Colombia, al Congreso de Panamá, a las potencias imperialista que se manifestaron en la época, como a la integración que tuvo el negocio de la Trata Negrera liderizado por los africanos dentro de un proceso que implicó el tránsito hacia el capitalismo liberal, donde la negra[4] ya había logrado adquirir rasgos y características que la diferenciara de la africana y sus epónimos[5] habían alcanzado la madurez para entender y sacarle provecho al juego político, legal y económico que se estaba dando por la debilidad de la clase mantuana que se dieron la tarea solamente de  aglutinar prebendas económicas, mientras que los desarraigados venezolanos que poseían una piel negra tenía cuajado un proyecto de país, en vista que habían comprendido que eran un sector mayoritario y que además poseían la capacidad intelectual (dado por la servidumbre y el papel desempeñado al lado de los amos que tenían puestos políticos, administrativos y diplomáticos) para crear y administrar un nuevo estado dirigidos por negros,  el cual fue disuelto a partir de que el 6 de julio de ese mismo año de 1816, al desembarcar en Ocumare de la Costa dicta una Proclama que se  refería a los esclavos: "Esta porción desgraciada de nuestros hermanos que han gemido bajo las miserias de la esclavitud, ya es libre. La naturaleza, la justicia y la política piden la emancipación de los esclavos: de aquí en adelante sólo habrá en Venezuela una clase de hombres, todos serán ciudadanos". Pese a estos decretos e intenciones nobles, pasarán todavía muchos años, hasta que en 1854 el Presidente José Gregorio Monagas venció la tenaz oposición de los terratenientes y esclavistas y decretó la definitiva abolición de la esclavitud[6].

En ese sentido, para reforzar nuestras identidad, tenemos que comenzar por desmontar las teorías aquellas que viene incentivando que somos descendientes de Africanos (porque también lo seríamos de Europeos, árabes, y de la herencia que dejaron y proliferaron los indígenas y esto traería una problematización más compleja, del cual quienes se autodenominan como afro descendientes, la obvian y están a la saga para sacarle al gobierno bolivariano cualquiera prebenda), que se traducen en sociedades de solidaridad mecánica, que se convierten en trabas epistémicas que impiden el acceso concreto a la verdad, puesto que se ponen en peligro los criterios que sostienen el nacimiento de la Republica, es por ello, que hay que acceder a posiciones mucho más abiertas que superen la camisa de fuerza de las ideologías colonizadoras…, pero para ello hay que reconocer esta realidad y por otro lado, aprender  a identificar las matrices ideológicas dominantes para luego detener su reproducción y propagación, las cuales se han convertido en un verdadero y real impedimento para acceder a nuestra propia personalidad histórica y cultural.

Estos nos llevaría a desmontar, la reiterada afirmación de que somos un pueblo nuevo, que somos mestizos indiferenciados, que somos descendientes de africanos  y que lingüísticamente no nos identificamos con la riqueza de las lenguas indígenas que tenemos en América, porque no logramos conservar las nuestras y esto se debe a que hemos sido víctimas de esa manipulación de la visión occidentalizada que ha simplificado realidades diversas y complejas en nombre de la unidad, convirtiéndose esta postura en la clave del empobrecimiento colonial del que hemos sido víctimas. Mientras no seamos capaces de entender que el universo no se opone a la unidad ni la unidad se opone al universo, mientras no resolvamos ese dilema estaremos incursionando en esa bestialidad que es la dominación occidental. A estas alturas no se puede seguir hablando de que la civilización está allá y la barbarie está aquí. En todo pueblo, en toda cultura existen ambas características, lo que sucede es que cuando estos pueblo entra en decadencia porque no les dieron el debido a la naturaleza, entonces utilizan todas sus tecnología en función de imponer la barbarie, con el propósito de acaba con todo, como está pasando con el capitalismo actualmente, que se ha convertido en la bestia mejor ilustrada de la barbarie del siglo XXI y que llevo a los africanos libios  a matar a punta de machete a los otros africanos o el caso de Siria, donde se puede notar claramente que la Liga Árabe  se convertido en una especie de imperio que dispone de los países africanos a su antojo.

Por ello sostenemos que somos venezolanos creadores de la cultura negra, y lo planteamos como una posibilidad para desarrollar el imaginario que posee una piel negra, puesto que los vinieron América fueron los determinados por el sistema tribual africano como negros (esto quiere decir,  que desde hace muchas centuria el termino estaba creado en Asia, Europa y África y era de manejo de la aristocracia tribual para calificar aquellos que no eran africanos y menos miembros de su sistema religioso, el cual se convirtió en una herramienta de coacción que controlaba las relaciones dentro delas culturas que pertenecían al sistema tribual africanos. Es por ello que dicha construcción no provino del europeo solamente, sino también del africano), el cual debe convertirse en un sujeto crítico, solidario, cooperativo, autogestionario y bolivariano. Pero es necesario liberarlos de esos paradigmas fosilizados que no han permitido el fortalecimiento de su autoestima para poder combatir la falacia y los argumentos que sostienen que somos descendientes de africanos e internalizar que somos descendiente de la condición inhumana quien convirtió a seres humanos racionales en sub humanos para depositarlo en asientos y venderlo a los barcos negreros como Pieza de India, y de esta manera, encauzarlo dentro de los valores fundamentales que implica la solidaridad para poder entender la importancia que tienen el esfuerzo colectivo y la participación organizada sobre la base de la nueva materialidad dentro la Nueva República que se está formando, porque algo que no podemos olvidar, es que este proceso bolivariano no sólo produjo un nuevo individuo, ideológicamente, políticamente, socialmente, culturalmente biológicamente y genéticamente, sino que además, la variedad de experiencias sociales y culturales permitieron reinterpretar ese momento histórico, según sus necesidades y consecuencias históricas, conllevando a crear una existencialidad distinta a la africana, europea y a la indígena que los llevó a convertirse en sujetos creadores de cultura, puesto que el aporte que hicieron, marcó un hito de gran trascendencia a la humanidad.

 Es por ello que sostenemos que se debe fortalecer la manifestación de la energía generativa de los humano, como el desenvolvimiento del potencial de los individuos en sociedad, el cual debe de ser una de las misiones  fundamentales del estado venezolano, puesto que debe visibilizarse el proceso dinámico de creación y afirmación de la ciudadanía y nacionalidad para trasformar el país en base al principio de verdad, equidad, y es allí, donde el reconocerse como producto de una determinada realidad histórica, juega un papel importante, ya que se transforma en el vehículo más justo, eficaz y legitimo para estimular y enaltecer las posibilidades de expresión del pensamiento y las aspiraciones del hombre en sociedad, ya que es el lugar donde se crea y recrean la unidad simbólica de los pueblos.

Cuestión que nos lleva a comprender…, que en el proceso que sufren las dinámicas humanas, las incidencias que se producen a lo interno, conllevan a su transformación, porque los seres humanos nos caracterizamos por crear condiciones de existencias que mejoren nuestra situación en el mundo. Esto quiere decir.., que siempre tendremos esa ventaja y no entendemos porque se impide tal visibilizaciòn, en  que la cultura negra se transformó en conductor de su propio proceso, puesto que fue el sujeto activo que se convirtió en el engranaje de mucha importancia que  originó que los nuevos estados nación se consolidaran, en el que no se debe olvidar que en ese proceso que vivieron quienes fueron considerados como negros, tienen las manos bien enlodadas las culturas africanas, los cuales eran los encargados en tierra de tal negocio (porque eran dueños de los asientos), donde el producto que se vendían eran vidas humanas y los europeos se daban el caché de comprarlos (los cuales los intercambiaban por cualquier objeto suntuario), ya que era imposible que en las primeras centurias, África se  presentaba como una región inhóspita, llena de animales desconocidos, con ambientes naturales complejos, donde se hacía necesario adaptarse (ya que cualquier contacto con  cualquier insectos implicaba la muerte. Riesgo que los europeos no iban a correr y es por ello que se hizo necesario adueñarse de su formas elementales de la vida religiosa, el cual ejerció una especie de control sobre las otras formas de vida) con una tecnología marítima que se caracterizaba por ser demasiada incipiente, donde la presencia de una fauna y flora desconocida que  se hacía inminente y dominante ante unos seres humanos que se caracterizaban por poseer una piel blanca y que además carecían de su comprensión y conocimiento, además que ese capital humano no estaba ganado para estos menesteres, en el que sólo les quedó como única salida,  utilizar manos esclava dentro del proceso de expansión, porque los negros era individuos muy dados para aprender en el arte de la tecnología marina, como otros oficios de la época y por ello tenían un alto  valor y es por ello que no creemos en el que los europeos subestimaran su capacidad, sino por el contrario siempre les tuvieron miedo y estuvieron atentos a la forma como se expresaban en cada movimiento, en cada gestualidad donde la lujuria y la sensualidad siempre estaban presente, prohibida para los blancos europeos por la Iglesia Católica y por el sistema de casta que imperaba en la Europa feudal, pero no para los negros que eran muy habidos para que la mujer europea se adueñara rápidamente de ese potencial que estaba incurso en su naturaleza, haciéndolos suyos y desbordándose en un sin fin de torbellinos que la hizo quebrantar sus propias reglas de conducta para darle rienda suelta a ese polimorfo que se encontraba esperando su momento para manifestarse y que se transformó en la llave que le dio salida a los problemas de la carne, como  de cualquier aprendizaje que se hacía necesario en el espacio de trabajo, en el que eran fieros y grandes aportadores por su fortaleza a  ser muy productivos y de poca voluntad para negarse a la faena laboral (que eran inhumanas y donde se trabajaban más de quince horas diarias).

Por ello, no reconocer tal situación, conlleva a no comprender  que los denominados como negros fueron tan inteligentes…, que tal actitud o potencialidad los llevó a crear una nueva  geografía espacial (el nacimiento de la fiesta de San Juan es parte de este proceso y no es casual que los negros bailen y emborrachen al impuesto  en forma de burla, al son de los tambores construido con madera blanda, puesto que estos tenían claro el papel que jugaba tal manifestación que al pasar del tiempo se ha convertido con mucha fuerza en parte de la idiosincrasia venezolana y hoy se celebra con una fuerte carga emotiva que permite la cohesión de los estratos sociales donde se celebra tal festividad), alimentada por un realismo negro (no africano) que no se puede negar en los nuevos espacios donde tenían presencia, al cual hay que aceptar y estimular, donde quien te dio cobijo en tierras distintas, fueron unas culturas distintas a la africanas, mientras éstas, se estaban usufructuando lo adquirido  por tu venta, donde allí te hiciste, procreaste y te desarrollaste, tan igual que los criollos, mantuanos e  indígenas, en el que se tiene que comprender que tal situación era el producto de una dinámica histórica discriminatoria, entre las diferentes formas de vida y la manera como se controlaban las formas elementales de la vida religiosa, las cuales eran administrada por la aristocracia tribal y luego por los europeos que si tenían claro que los sistemas de representación que el hombre se ha hecho del mundo y de sí mismo (por ello no es casual que el 24 y 25 de Junio se  celebre la manifestación de San juan una vez al año, la cual se romantiza en la medida que el tiempo va pasando y perdiendo su periferia y núcleo central de sentido), en el que tal manifestaciones han venido recreándose, convirtiéndose en el producto de una inmensa cooperación que se extiende no solamente en el espacio, sino en el tiempo y donde el reino social es un reino natural, que sólo difieren de los otros por su mayor complejidad, en el que no puede haber sociedad que no sienta la necesidad de mantener y reafirmar, la idea que constituyen su personalidad, y es por ello que se convirtieron en sujetos activos, en el que se debe entender que gracias a la inteligencia de esos seres considerados como subhumanos por el sistema tribual africano y el modo de producción feudal europeo, hoy nos encontramos discerniendo sobre el tema y es una lástima que seamos tan ingratos para no reconocer tal esfuerzo para venir a plantear un discurso (el de la afro descendencia) que no tiene ningún argumento que lo sustente, en el que  se ha tratado de crear una matriz que conlleve a olvidar el papel jugado por el sujeto creador, el cual es  muy importante porque permite nuestro reconocimiento y que creemos que quienes en el país aspiran que se les reconozca su ascendencia africana subestiman su capacidad  para seguir con el cliché  de la africanidad que en el fondo lo que busca es negar la venezolanidad a pesar que en el Censo 2011, el pueblo venezolano lo rechazó y ellos no han querido asumir tal rechazo, porque este pueblo se reconoce como venezolano y no es posible que ellos acepten que se ponga el termino afro ante el de venezolano, es decir, no les importa asumir una toponimia que no les corresponde y ese es muy delicado para nuestro país, en un momento histórico que no depende de la imposición y opulencia de otros países considerados potencias y no tenemos al Fondo Monetario Internacional (FMI) dándonos órdenes, ni diciéndonos que debemos implementar para alcanzar el subsidillo desarrollo .

Actitud que constituye un acto de diferenciación violenta y excluyente, que  permitió la construcción de una identidad, fundamentada en la experiencia racista, producto del secuestro y movilización forzada que conllevó a que  en el contexto descrito se les atribuyeran significaciones  negativas y peyorativas y eso lo estamos notando de quienes en el país se hacen denominar afro descendientes. Por ello el esfuerzo debería ser orientado a presentar al origen de estos contenidos, en el contexto en donde  surgieron y se hizo manifiestos, su carga ideológica, a partir de lo cual este sujeto históricamente oprimido comprenda la génesis de su situación y pertenencia de clase.

De este modo, el liberarse de esa visión ideológica  que se produce a través del lenguaje, solo será posible en la medida en que a los actores sociales internalicen que se hace necesario apropiarnos de las opciones y herramientas históricamente negadas, para que el venezolano de piel negra internalice que se debe encontrar  en capacidad de abordar su situación social específica y diferenciada, desde su experiencia, contextos y significaciones que le son cómodos y comunes, en el que tiene que entender que se trasformó en un sujeto creador de cultura y que el producto creado nada tiene que ver con la africanidad y menos con lo europeo.

Distinción que se percibe de manera clara en el lenguaje que utilizan quienes se auto determinan como afro descendientes en Venezuela, es decir, en las expresiones orales que a diario utilizan sus acólitos y expresan en sus diferentes conversaciones, cargadas de estereotipos y prejuicios raciales en contra de los venezolanos que tienen una piel negra, en donde se  reproduce la imagen del negro[7] de forma discriminante y marginal que en todo momento se quiere negar, cuya estereotipaciòn ha servido como fundamento ideológico y cultural para que las culturas africanas los cazaran y lo vendieran a los europeos y éstos llevarlos a una geografía diferente y para esclavizarlos.

Por ello se hace necesario ubicar el lenguaje al interior de la complejidad de la estructura social más allá de nuestras conjeturas a priores, en el que hay que develar los vicios racistas y para ello, hay que tomar en cuenta la participación que han tenido en Venezuela quienes se auto determinan como afro descendientes dentro de la administración estatal del Gobierno Bolivariano, en el que pudiéramos decir, que ha ocupado cargos de relevancia, pero pensamos que se ha impuesto el uso de dichos cargo para consecución de prebendas personales que el imponer un discurso en pro de los venezolanos que poseen una piel negra; lo cual ha reducido sus posibilidades de participación ciudadana dentro de todas las esferas de la vida diaria, en el que se ha asumido más aun, cuando en la actualidad quienes se autodeteminan como afro descendientes no quieren entender que "En el caso venezolano, la reciente adopción del término " funcionaría como un comodín que pretende sustituir otras etiquetas que, de acuerdo con los asesores del gobierno en estrategias de comunicación, no logran devolver la dignidad a estos grupos raciales. Identificarse como negra o negro indicaría, entonces, una muestra de altanería y el reconocimiento público de una condición marginal. Para la escritora y académica haitiano-venezolana, Michaëlle Ascencio, "afro descendiente" y "afro venezolano" constituyen atajos para evitar el uso de una nomenclatura atiborrada de prejuicios (negro) en una sociedad que, en apariencia, se enorgullece de su diversidad racial." [8], más aun, cuando en nuestro país se cumple lo dicho por Van Dijk en cuanto que: "Los grupos blancos dominan étnica o racialmente a diversos grupos por medio del ejercicio de varios tipos de control físico, social o simbólico"[9].

Para ello se hace necesario denunciar el racismo que anida en el lenguaje de estos grupos racista y discriminatorios, llenos de oído en contra de los venezolanos que poseemos una piel negros, el cual se ha convertido en un sesgo para discriminarnos, desde categorías tienen la capacidad de imponer un discurso que termina siendo escuchado, creído, obedecido y reproducido, por sus acólitos,  en el que se ha desarrollado todo un proceso de negación que en términos de Franz Fanón[10], pudiéramos considerar que la "alienación síquica que degenera en una imagen distorsionado y afeada de sí mismo. Una imagen producto del proceso de colonización en el que el venezolano de piel negra fue llevado por imposición aceptar una supuesta inferioridad natural, la cual, para poder ser superada debía colocarse la "mascara blanca", es decir, aceptar la cultura superior (europea) y renegar de su cultura, de su apariencia, de su lengua o modo de hablar".

 



[1] La palabra negro vino del río Níger, (no porque esclavos fueron transportados por allí).  El nombre original fue nigritae y el río lo llamaban Nigris. Era una corrupción del berebere Gher-n-gher, que significaba río de ríos. En otras palabras, los locales creían que el río era el más grande del mundo.  La gente que vivía junto al río los referían como la gente del río o nigritae. Sólo fue con el tiempo que por el color oscuro del río y el color oscuro de los nigritae que la palabra se volvió sinónimo de oscuro.  Con el tiempo remplazó a la palabra romana ater para significar el color que ahora llamamos negro. En otras palabras, negro viene de un término étnico, no de una descripción de color.

[2] El referéndum constituyente o consultivo de Venezuela de 1999, también llamado Referéndum para la Convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente, fue un consulta vinculante celebrada el 25 de abril de 1999,1 fue promovido por el presidente de la República Hugo Chávez, que mediante un decreto ejecutivo y después de la aprobación de la Corte Suprema de justicia y revisión del Consejo Nacional Electoral, realiza dos preguntas a los electores, básicamente referidas a la sustitución o No de la Constitución de 1961 por una nueva y la aprobación de las bases del funcionamiento de la Asamblea Nacional Constituyente.

[3] La Constitución de Venezuela de 1811 fue la primera Constitución de Venezuela y la primera de América Latina, promulgada y redactada por Cristóbal Mendoza y Juan Germán Roscio, siendo sancionada por el Congreso Constituyente de 1811 en la ciudad de Caracas el día 4 de diciembre de 1811. Fue derogada el 21 de julio de 1812 por la capitulación de Francisco de Miranda en San Mateo. La constitución tuvo una vigencia de un año. Esta constitución de corte Federalista es aprobada por los representantes de las Provincias de Margarita, Mérida, Cumaná, Barinas, Barcelona, Trujillo y Caracas, quienes declararon su independencia del Imperio español durante el Congreso constituyente y acordaron la implementación del nombre "Estados de Venezuela" como oficial. En ella se reconocía a la Iglesia Católica Apostólica y Romana como la religión oficial del Estado venezolano. La elección era de tipo indirecta o de segundo grado: Sólo los hombres que tuviesen propiedades podían elegir a un representante por cada 20.000 habitantes quienes a su vez elegirían los representantes de la Cámara de Diputados y Senadores además de los tres encargados del Poder Ejecutivo (triunvirato). Una vez firmada, fueron aprobados 228 artículos.

[4] Sin duda, los europeos herederos de una tradición filosófica, bien lo comprendieron, pues efectivamente asumieron que mediante la asignación de un lenguaje discriminatorio sería posible institucionalizar, transmitir y mantener el racismo. En este contexto el lenguaje sin duda se constituyó como un elemento significativo en el proceso de construcción de una sociedad jerarquizada, instaurándose como elemento de fomento, legitimación e institucionalización de las desigualdades. De este modo el término "negro/negra", fue empleado para denominar a las personas africanas secuestradas y esclavizadas, como a sus descendientes (afros descendientes) nacidos en territorio americano; no obstante, dicha nominación cumpliría una clara y definida función social, la cual sería: diferenciar a todo individuo no europeo, descalificarlo y subordinarlo por el color de su piel. Así, "Lo negro" fue asociado al mutismo, la invisibilidad, la ignorancia, a la noche y en consecuencia a la oscuridad, como lugar por naturaleza inhóspita, desolada, desapacible y llena de vicios, en efectiva contraposición a lo blanco.

[5] Los negros herbolarios eran los que elaboraban pócimas con ciertas hierbas, a las que se les atribuía cualidades curativas. Las prácticas de brujerías de los negros causaban gran impresión. Las manifestaciones mágico- religiosas de los africanos eran vistas con asombro y respeto. Por su parte los africanos se aprovechaban de ello para adquirir poder, aplicando los usos y costumbres de sus ancestros.

[6] Después de varias discusiones en el Congreso, en base a un Proyecto de Ley presentado por 31 diputados el 3 de marzo de 1854, superadas las objeciones de que la agricultura se quedaría sin mano de obra, se terminó por acallar la voz de Vicente Amengual, uno de los más empecinados opositores, quien sostenía que el proyecto era anticonstitucional y que «conduciría a la República a un abismo espantoso". Así se pudo llegar a una mayoría y el Congreso sancionó la Ley el 23 de marzo. El Presidente José Gregorio Monagas se apresuró a ponerle el «ejecútese» al día siguiente, 24 de marzo de 1854. Y con eso pasó a la historia, porque el resto de su gobierno fue bastante incoloro. Monagas dejaba libres, con su firma, a unos cuarenta mil ciudadanos, que habían cargado por generaciones las cadenas del oprobio. Un artículo de la Ley, tajante, basta para definirla: «Queda abolida para siempre la esclavitud en Venezuela». .

[7] Fue conceptualizado como "Es toda persona de piel fuertemente pigmentada, pelo muy rizado, nariz achatada, y labios gruesos. Puede tener prácticas culturales de origen africano, aun cuando no la identifique como tales",  por la Gerencial General de Estadística Demográfica del Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Subcomité de Estadística de poblaciones "afro descendientes" -Organismo integrado por la ROA y RAV  y demás grupos que pertenecen a estos movimiento- quienes impusieron su posición, a pesar de que las pruebas piloto, demostraron la oposición del pueblo venezolano a dicho término).

[8] Leer Pavor racista y etnopopulismo en Venezuela, por Patricia Valladares Ruiz. Buscar en Internet.

[9] VAN DIJK, Teun A (1997). Racismo y Análisis Crítico de los Medios, Barcelona, Paidos editores.

[10] FANON, Frantz, Piel Negra, Mascaras Blancas, Buenos Aires, Editorial Abraxas, s.f.